Cuarto Domingo de Tiempo Ordinario
Solemne Procesión de Clausura II Jornada de Oración – Jesús Nazareno de la Caída
Protector Perpetuo de la Humanidad, Rey y Señor
Templo de San Bartolomé Becerra
Antigua Guatemala
Reflexión:
Este día hemos venido para orar ante el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Para elevar el pensamiento a ellos; para alabarles y darles gracias; para suplicarles perdón y pedirles por nuestras necesidades; para contarle nuestras preocupaciones y alegrías.
La Oración se puede hacer de diferentes formas: Usando las palabras de los santos, por ejemplo, el Padrenuestro y el Avemaría. También podemos usar nuestras propias palabras. También se puede ofrecer el trabajo y demás ocupaciones; ofrece al Señor el trabajo que realizamos; los sacrificios y esfuerzos de cada día.
Detalles del Adorno:
Cuatro Medallones que dicen:
“Aquí estoy mi Jesús, aquí me tienes humillado, pidiéndote de hinojos una mirada de tus dulces ojos, que inflame con amor mi corazón”.
Esos medallones nos recuerdan el canto que aprendimos desde muy pequeños y con el que nos ponemos en presencia del Hijo para pedir perdón.
La Consagrada Imagen, por primera vez sale en procesión con túnica negra y cojín de color lila, destacando entre talladuras color plata.
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